Guillermo Coppola se levantó a las 4 de la mañana de este viernes 15 de marzo de 2024, y 7 minutos después estaba dándole play al primer capítulo de “Copolla, el representante”, su serie, que se estrenó en la plataforma Star+ y ya generó una expectativa enorme por estos seis capítulos que intentan retratar la vida de quien fuera el principal representante de Diego Armando Maradona. Ahora atiende a ADN+ desde su casa, emocionado, a punto de irse a la radio donde se luce junto a Guido Kakzka y equipo en la FM 100 de lunes a viernes de 10 a 13.

-¿Estabas ansioso por ver la serie o ya habías estado espiando algo?

-Nooo, no había visto nada, así que nos levantamos muy temprano, de madrugada, con Cori –mi mujer– y  nos pusimos a ver lo que es una serie de ficción en la que es cierto que hay cosas que sorprenden, que me impactan al recordarlas, y que estoy seguro que cuando la vean se van a dar cuenta de las cosas que hablo, porque muestra cosas conocidas y muchas otras que por ahí son nuevas para la mayoría del público.

-¿Qué porcentaje de todo lo que viviste, tanto en tu vida personal como al lado de Diego, vamos a poder ver en esta primera temporada?

-La verdad es que quedaron muchas cosas afuera, ojalá haya más temporadas para terminar de contar la historia completa, es difícil hablar de un porcentaje pero realmente hay muchas cosas lindas que atrevesamos y también cosas difíciles, por eso le pedí a los amigos la crítica sincera, porque habrá cosas que gusten y otras que no pero esa es la historia real.

Una escena donde el representante se entera que su pareja de ese momento, Yuyito González, está embarazada.

-¿Qué hechos de lo que pudiste ver hasta ahora te emocionaron particularmente?

-Hay una parte muy sensible que me hizo lagrimear que fue el recuerdo de ‘La nonna’, una señora grande que vivía en una parte de Nápoli que se llama Tredici Dicesa, trece curvas en bajada significa, una viejita que asomaba su cabecita prácticamente al ras de la vereda y un día me sorprendí con eso porque si, por ejemplo, había agua la salpicabas y le mojabas la cara, entonces un día se me ocurrió parar y ahí vi cómo vivía: se entraba por una puerta de una casa normal pero ella iba para abajo, vivía en un sótano. Y después de mucha insistencia me permitió arreglarle toda la casa: le levanté el piso -ella se paraba en un sillón para llegar a ese huequito y ver la calle-, le hice un ventanal más grande que el de mi casa, y la viejita me agradeció tanto tanto en sus últimos años que esa parte me sensibilizó mucho. Porque con Claudia, la señora de Diego, que me ayudó mucho, le hicimos vivir unos años bárbaros, y esto me lo hicieron acordar ahora en la serie y me emocionó hasta las lágrimas.

-¿Qué te pasó al verte interpretado por Juan Minujin?

-Juan hace una interpretación del carajo, pero a lo grande mal, veía cuando Juan interpreta el día que fui a ver a Don Enzo Ferrari, o cuando cuenta la charla con (Silvio) Berlusconi y es impecable, es como si me estuviera viendo a mi mismo, como si lo hubiesen filmado en ese momento. Porque no es una  imitación, es una interpretación,  interpretación espectacular.

-¿Sentís al verla que se respetó la fidelidad de cada hecho, muchos de los cuales son tan increíbles que parecen que hubieran sido ficción?

-Sí, hay una fidelidad absoluta, tanto en los momentos buenos como en los momentos malos, porque la vida es así. He cometido errores pero nunca traicioné, porque el amigo no traiciona. A veces la vida te pega golpes y te la tenés que bancar, es la vida misma, con altos y bajos, entonces vos me preguntás cómo te ves representado: me veo ficcionado, ese término lo define bien, con una realidad que me lleva a cada momento vivido. Después están también los caprichos de Diego, que por ahí algunos les van a gustar y a otros no, pero está presente el amigo, el amor incondicional, ese que cuando vos confiaste te entregas al amigo completamente.

-¿Qué te genera que ayer el Concejo Delibertante de Mar del Plata, una ciudad especial para vos, te haya destacado como “Mérito Deportivo”?

-La verdad que estoy muy feliz porque todos los concejales, por unanimidad, decidieron darme este reconocimiento, y me generó mucha emoción porque son cosas que a uno le llegan de grande. Son 50 años en el deporte, empecé en 1974 con Vicente Alberto Pernía y todos, sin ninguna objeción de ningún partido político, votaron a favor de este nombramiento que me lo da Mar del Plata, que es también mi ciudad: ahí hice Primero Inferior, Primero Superior, tomé la primera Comunión, tuve mi primer trabajo, el primer conocimiento de la mujer en la intimidad, todas las cosas muy importantes en mi vida.

La serie de Guillermo Cóppola ya está disponible en Star+, cuenta con 6 capítulos de 45 minutos cada uno, la dirección de Ariel Winograd, y las actuación principal de Juan Minujin.