SALUD
2 de junio de 2025
Especialista alerta sobre el uso de vapeadores en niños y adolescentes

La licenciada Marines Reartes, referente del Centro de Tabaco de la Dirección de Enfermedades Crónicas, lanzó una seria advertencia sobre el uso de vapeadores, calificándolos como dispositivos altamente tóxicos que están siendo utilizados estratégicamente por la industria tabacalera para captar a las nuevas generaciones.
No es vapor lo que inhalan, son aerosoles cargados de sustancias nocivas”, aclaró Reartes, desmintiendo el mito instalado de que el vapeo es una alternativa inofensiva o útil para dejar de fumar.
La especialista explicó que estos dispositivos, conocidos popularmente como vapers, están mal denominados, ya que no emiten vapor de agua, sino aerosoles químicos que pueden causar graves daños a la salud. Entre los compuestos identificados se encuentran el diacetilo –asociado con la enfermedad pulmonar conocida como “pulmones de palomitas de maíz”–, además de sustancias como THC y CBD, que potencian sus efectos nocivos.
Riesgo real para niños y adolescentes
Uno de los aspectos más alarmantes es el foco que las tabacaleras han puesto en niños y adolescentes. A través de sabores como algodón de azúcar, chicle o frutas, combinados con diseños modernos y estrategias de marketing con influencers, los vapeadores se presentan como un objeto atractivo, seguro y socialmente aceptado.
“Se ha detectado venta de vapeadores dirigidos a menores desde los 8 años en redes sociales. Esta es una situación sumamente preocupante”, señaló Reartes.
La licenciada también remarcó que estos dispositivos no están regulados, no presentan etiquetas claras sobre sus componentes, y no hay información suficiente sobre lo que realmente se está inhalando. “Estamos frente a una moda peligrosa, una aceptación social que está enfermando a nuestros jóvenes sin que siquiera lo sepan”, sostuvo.
Llamado a la acción
Desde el Centro de Tabaco se insta a los adultos a estar atentos al consumo de vapeadores por parte de sus hijos, revisar redes sociales, dialogar sobre los riesgos reales del vapeo y exigir políticas de regulación más estrictas.
“Consumir algo que no sabemos qué contiene es poner en riesgo la vida. Es urgente que tomemos conciencia y actuemos para frenar esta tendencia antes de que sea tarde”, concluyó Reartes.
COMPARTIR:
Comentarios
Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!