HISTORIAS DE VIDA
25 de octubre de 2023
El colectivero estrella de la línea 152 que hace reír a los pasajeros
Rogelio López es conocido como el chofer más feliz del mundo. Así lo llaman los mismos pasajeros y se hizo conocido con ese mote en las redes sociales. Su buena vibra contagia. Acá, su historia.
El precio del dólar, la inseguridad y la incertidumbre por las elecciones quedan atrás en el bondi que conduce Rogelio. Todos los que se suben al interno 101 de la línea 152 que va de Olivos a La Boca arrancan el viaje con una sonrisa gracias al buen ánimo del chofer.
El formoseño de 55 años saluda a todos con un buen día ensordecedor. “Yo me considero un servidor público. Cada vez que me siento frente al volante para empezar mi trabajo, me olvido de mí, de mis intereses y me aboco a los pasajeros que son los protagonistas. Pongo buena onda y a cada persona que sube le doy la bienvenida y trato de darle el mejor servicio. No importa la edad o la nacionalidad, ¡con todos soy igual! La gente siempre me va a ver feliz y sonriente. Muchos me han dicho ¡Rogelio no te jubiles, no queremos que te jubiles porque nos trajiste alegría a Buenos Aires! Ahí está la recompensa para un servidor público, la gratitud y la alegría del resto”, contó López.
Está a un año del retiro, pero como disfruta de lo que hace, quiere manejar durante un año más para sentirse útil para la comunidad.
Tras una vida difícil en el campo, Rogelio llegó a Buenos Aires con 19 años y luego de intentar estudiar, emuló a su hermano, quien era chofer de colectivo. Primero ingresó en la línea 68, donde trabajó entre 1990 y 1995, y luego pasó a la 152 en la que está desde hace 25 años.
“No tengo nervios, no tengo estrés, no tengo nada. Yo estoy siempre feliz, estoy contento trabajando, parece que ni trabajo ¡me divierto! Siempre fui así. A mí me gusta lo que hago. La reacción de la gente me ayuda a sentirme bien”, declaró en varias entrevistas.
Rogelio es activo en las redes sociales: en Instagram (@152rogelio_lopez) tiene casi 43 mil seguidores. Es más, varios compañeros copiaron sus saludos y lo imitan. “La gente necesita de esta buena onda porque están pasando muchas situaciones difíciles. Problemas familiares, problemas de consumo, problemas económicos, falta de dinero, de salud, de tantas cosas… La gente sube triste, desanimada, por eso yo disfruto de poder ayudar. Lo primero es darles la bienvenida… ¡Bien arriba che el espíritu! En la vida es importante mantener el espíritu”, contó el piloto feliz.
“Yo me levanto todos los días y me digo: tengo la vida, respiro, ando, tengo un trabajo, voy a ir a trabajar. Jamás digo que trabajo porque no me queda otra. Jamás escucharás de mi boca algo así. Voy a ir a trabajar y a pasarla bien. Pasarla bien significa tratar bien a toda la gente trabajadora, estudiosa… Esa es mi felicidad. La gente tiene que saber que trabajar es una bendición y ser feliz trabajando es lo mejor que te puede pasar”, cerró el chofer más feliz del mundo que contagia su energía en cada viaje.