Gallardo, conocida por su postura crítica en redes sociales, cuestionó la supuesta cifra de 9 millones de pesos que, según ella, ganan los senadores, acusándolos de "trabajar poco" y de "venderse". En un tono desafiante, la mediática reclamó por una mayor moralidad y transparencia en la política, mencionando la "Ficha Limpia" y criticando la falta de acción en torno a las leyes anticorrupción.

El planteo de Gallardo sorprendió a Mirtha Legrand, quien no pudo evitar intervenir en la conversación. Sin embargo, quien respondió con contundencia fue Carrió, quien desmintió la cifra mencionada por la vedette, aclarando que los diputados ganan cerca de 4 millones de pesos, no 9 millones como se había señalado.

La dirigente de la Coalición Cívica, lejos de mostrarse condescendiente, lanzó una polémica declaración sobre los “gatos” que, según ella, ganan fortunas y se casan con los corruptos, especialmente en el Conurbano bonaerense. Carrió no dudó en generalizar y en defender a aquellos diputados que, a su juicio, realmente trabajan, destacando a figuras como Paula Olivetto como ejemplos de honestidad dentro de la política.

El debate subió de tono cuando Gallardo replicó, defendiendo a los "gatos" como personas honestas, pero Carrió no se amilanó y siguió con su acusación, mencionando los matrimonios entre estos y los corruptos en el conurbano. Fue en ese instante cuando Mirtha, buscando calmar las aguas, intervino con su famosa “campanita”, cortando la discusión.

Este intercambio de opiniones dejó en evidencia la disparidad de visiones sobre la política y los sueldos de los legisladores, poniendo en el centro de la conversación una vez más el tema de la corrupción y la moralidad dentro del Congreso. Sin dudas, una edición para el recuerdo en la historia de los almuerzos de Mirtha Legrand.